El jugador uruguayo sufrió un paro cardíaco durante el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores contra San Pablo, evento que ocurrió el pasado 22 de agosto en el Estadio Morumbí.

Izquierdo, quien ingresó al campo para disputar la segunda mitad del encuentro, colapsó en los minutos finales del partido. A pesar de los esfuerzos del personal médico y la rápida intervención, fue trasladado en estado crítico al Hospital Israelita Albert Einstein de San Pablo, donde permaneció en terapia intensiva durante cinco días. Finalmente, el 27 de agosto, se confirmó su muerte debido a una muerte encefálica como consecuencia del paro cardiorrespiratorio.

El Club Nacional de Football emitió un emotivo comunicado en sus redes sociales expresando su profundo dolor y ofreciendo sus condolencias a la familia del jugador. El zaguero, conocido por su entrega y dedicación, deja un legado importante en el club, donde se destacó por su liderazgo en la defensa.

A lo largo de su carrera, Juan Izquierdo pasó por varios equipos uruguayos, incluyendo Peñarol y Liverpool, y tuvo una breve experiencia en el fútbol mexicano con el San Luis. Con Nacional, logró varios títulos y fue parte del plantel que compartió vestuario con estrellas como Luis Suárez, quien le dedicó un sentido homenaje en un reciente partido con el Inter Miami.

La noticia ha generado una ola de mensajes de apoyo y condolencias desde diferentes rincones del mundo del fútbol, destacándose el gesto de los jugadores de San Pablo, quienes acompañaron a la familia de Izquierdo durante su hospitalización.

Juan Izquierdo deja a su esposa y dos pequeños hijos. Su historia en el fútbol, marcada por la lucha y la humildad, será recordada como un ejemplo de perseverancia y pasión por el deporte.