En las últimas décadas la humanidad ha atravesado numerosas crisis: económicas, humanitarias, bélicas, energéticas, sanitarias, etc. Quizás la primera en donde se tomó conciencia de la importancia del cuidado del ambiente fue la aparición del agujero de ozono (https://www.bbvaopenmind.com/ciencia/medioambiente/que-fue-de-el-agujero-de-la-capa-de-ozono/). El deterioro de la capa de ozono, que comenzó allá por 1930 con la producción de sustancias  (CFC) que comenzaron a afectar al ozono (gas que nos protege de los rayos ultravioletas) y  que “finalizó” con la generación del Protocolo de Montreal  en1989, es considerado como el acuerdo internacional de protección del medio ambiente más exitoso de la historia. Hasta ahora es el único tratado que ha sido ratificado por todos los países del planeta. De forma transitoria, los CFC han sido reemplazados por hidroclorofluorocarbonos (HCFC), presuntamente menos dañinos para la capa de ozono, con el objetivo de sustituirlos en su totalidad por hidrofluorocarbonos (HFC) y otros compuestos. En el 2019 la NASA pudo comprobar una disminución de la destrucción del ozono de cerca del 20% comparado con el 2005. Si bien en años posteriores el agujero de ozono ha aumentado y luego decrecido, se espera que recién entre el 2060 y 2080 se cierre definitivamente.

El cambio climático, aumento del CO2 y otros gases que general el llamado “efecto invernadero”, debido a la actividad humana es nuestra autogenerada crisis ambiental y si bien no comenzó hace pocos años sí está previsto que nos afecte de aquí en más de diferentes formas aún impredecibles. Al igual que la destrucción de la capa de ozono, tiene causas y efectos, pero a diferencia de ésta, las causas son más diversas y por lo tanto han generado mucha controversia, porque afecta muchos intereses económicos, porque tiene quizás más implicancias sociales, y porque en definitiva está en juego el futuro de lo que llamamos humanidad.

Ahora bien, podemos disminuir las emisiones de CO2 desde nuestras casas sin afectar nuestra forma de vivir? La respuesta es que posiblemente no, pero, podemos lograr que una parte de ese CO2 se quede en el ambiente y no en la atmosfera? Si definitivamente, y esas acciones individuales pueden lograr algo? NO, pero si muchos tomamos conciencia, educamos y las practicamos, muchos granitos de arena si hacen la diferencia.

Que podemos hacer entonces? Hay varias acciones y muchas involucran nuestro ambiente cercano, nuestro parque, jardín, patio: compostar los desechos de la cocina, cultivar nuestro alimento, no aplicar agroquímicos, reciclar, reutilizar, etc. Y también es necesario proteger los ambientes naturales, que son los principales sistemas que reservan y absorben el CO2 atmosférico. Nuestro monte y los pastizales son esenciales para derrotar al cambio climático, y eso implica sostenerlos en forma completa, sus plantas, sus hongos, sus animales, todos los eslabones de una maravillosa red que nos brinda muchos servicios que ya no podemos desconocer y que debemos proteger.