El ex volante de la selección argentina, reconocido por su inteligencia en la cancha y fuera de ella, impartió una charla que no sólo abordó aspectos tácticos y metodológicos, sino que tocó el alma de muchos presentes. Uno de esos momentos quedará grabado en la memoria de los asistentes, cuando un entrenador, visiblemente conmovido, rompió en llanto al dirigirse a Aimar.

El entrenador, al tomar el micrófono, apenas pudo pronunciar unas palabras antes de que la emoción lo embargara. Entre sollozos, expresó su profunda admiración por el exjugador y su deseo de sacarse una foto con él al finalizar la jornada. “Gracias por lo que hacés por los chicos, por los valores que transmitís”, fue todo lo que alcanzó a decir antes de que las lágrimas lo traicionaran. La reacción de Aimar fue pura empatía: se acercó, lo escuchó con una sonrisa cálida y compartió un breve pero emotivo abrazo con él, reconociendo la importancia del momento.

El fútbol, mucho más que un deporte para Aimar

Este episodio es sólo una muestra del tipo de influencia que Pablo Aimar ha ejercido no solo en la cancha, sino en la vida de miles de personas. A lo largo de la conferencia, Aimar destacó la importancia de devolver al fútbol su esencia lúdica, especialmente en las divisiones infantiles y juveniles. «El fútbol, antes que una competencia, es un juego», enfatizó. Su mensaje resonó con fuerza en una sala llena de técnicos que, como el entrenador que se quebró en llanto, reconocen en Aimar a un referente no solo por sus logros deportivos, sino por la humanidad y humildad que siempre lo han caracterizado.

Un legado que trasciende el campo de juego

Pero la conferencia no se limitó a lo emotivo. Aimar, junto a otros integrantes del cuerpo técnico de la selección argentina, habló sobre la metodología de entrenamiento y los objetivos para el desarrollo de jóvenes talentos. Sin embargo, uno de los momentos más destacados de su presentación fue cuando se refirió a la salida de Ángel Di María de la selección. Aimar describió la decisión de Di María de colgar la camiseta nacional como «espectacular», destacando que el jugador rosarino se fue en el momento exacto, después de haber dado todo en la cancha. “No mucha gente se va en el momento justo, y él lo hizo”, subrayó Aimar, recordando la memorable actuación de Di María en la final de la Copa América 2021.

El poder de la emoción en el deporte

El evento en Río Cuarto fue mucho más que una conferencia de capacitación técnica. Fue una muestra de cómo el fútbol, cuando se vive desde el corazón, puede generar vínculos emocionales profundos. Para muchos entrenadores, como el que no pudo contener las lágrimas al hablar con Aimar, el fútbol es más que un deporte: es una escuela de vida. Y en esa escuela, Pablo Aimar es uno de los maestros más inspiradores.