El Estadio Tomás Adolfo Ducó fue escenario de uno de los encuentros más calientes de la Liga Profesional. Huracán y Boca Juniors empataron sin goles en un partido donde las emociones se trasladaron a los enfrentamientos, las decisiones arbitrales y un clima de tensión generalizada.

Un inicio marcado por los ánimos caldeados

Desde el comienzo, la hostilidad quedó en evidencia. La salida de los equipos al campo fue acompañada de una estruendosa silbatina hacia los jugadores de Boca, especialmente cuando posaron para la foto oficial. La situación no mejoró durante el minuto de silencio en homenaje a Diego Maradona, con gritos y abucheos que interrumpieron el momento.

En la cancha, el partido fue una constante disputa, con infracciones recurrentes y discusiones entre jugadores. Los hinchas locales estallaron de furia cuando el árbitro Hernán Mastrángelo amonestó a Walter Mazzantti tras una falta a Frank Fabra, mientras los cánticos y los insultos subían de tono desde las tribunas.

Proyectiles y disturbios en la Platea Miravé

La situación se agravó cuando los suplentes de Boca salieron a calentar cerca de la Platea Miravé, un sector históricamente problemático. Allí, cayeron proyectiles y comenzaron los cruces verbales entre hinchas y jugadores. Marcos Rojo, Gary Medel y Agustín Martegani fueron blanco de los ataques, incluido el lanzamiento de una bolsa de hielo hacia el defensor argentino. La seguridad privada no pudo controlar a los hinchas y fue necesaria la intervención de la infantería para calmar los ánimos.

El VAR y la jugada más controvertida

El punto de quiebre llegó en el tiempo de descuento. Mastrángelo sancionó un penal para Huracán tras una caída de Mazzantti dentro del área, pero fue alertado por el VAR sobre una infracción previa del delantero. Tras revisar la jugada, el árbitro anuló la pena máxima, lo que desató una ola de reclamos de los jugadores locales y cánticos de protesta de los hinchas quemeros.

Tensión en el postpartido

Al finalizar el encuentro, los incidentes continuaron. Dirigentes y allegados de Huracán intentaron increpar al árbitro en la entrada de su vestuario, pero fueron interceptados por la seguridad. En paralelo, un grupo de hinchas intentó intimidar a periodistas que cubrían el partido. Como consecuencia, Boca decidió suspender la conferencia de prensa de Fernando Gago.

Por su parte, Frank Darío Kudelka habló ante los medios, cuestionando la actuación arbitral: “No veo manos negras, pero es raro que nos anulen un gol en esa jugada. Parece que el VAR tiene más poder que los árbitros en cancha”.

Un cierre amargo

El empate dejó a Huracán en desventaja en la lucha por el título, mientras Boca rescató un punto valioso en la pelea por la clasificación a las copas. Sin embargo, el protagonismo no estuvo en el juego, sino en los disturbios y la violencia que opacaron el espectáculo. Con tres fechas restantes, el campeonato promete más emociones… y polémicas.