Esta iniciativa surge con la intención de reducir los enfrentamientos y tumultos que a menudo ocurren alrededor de los árbitros, garantizando así un mayor respeto hacia la autoridad en el campo de juego.

El concepto de la “zona exclusiva para capitanes” establece que solo el capitán de cada equipo estará autorizado para acercarse al árbitro cuando se tomen decisiones cruciales durante el partido. Esta regla, ya probada en torneos europeos y en ligas sudamericanas como la brasileña, demostró su eficacia en disminuir la presión sobre los árbitros y mejorar el orden durante los encuentros.

Los detalles de la implementación

La Comisión de Árbitros de la Liga Profesional ha establecido un protocolo específico para la aplicación de esta norma:

– Interacción exclusiva: Solo el capitán podrá acercarse al árbitro para dialogar sobre decisiones importantes, siempre de manera respetuosa. El resto de los jugadores deberán mantenerse alejados del juez.

– Sanciones: Cualquier jugador que incumpla esta regla, acercándose o rodeando al árbitro sin autorización, será amonestado con tarjeta amarilla. Esta sanción busca disuadir cualquier intento de intimidación hacia los árbitros.

– Responsabilidad del capitán: Los capitanes tendrán la tarea adicional de asegurarse de que sus compañeros respeten la norma y se mantengan alejados del árbitro. Además, deberán llevar una identificación clara que los distinga como responsables de la conducta de su equipo.

Casos especiales y excepciones

Si el capitán es el arquero, antes del inicio del partido se deberá informar al árbitro qué jugador será designado para acercarse en su lugar durante las decisiones importantes. Solo este jugador o el arquero podrán interactuar con el árbitro, pero nunca ambos. Si el jugador designado es sustituido o expulsado, se deberá nombrar a otro jugador para asumir esta responsabilidad.

Esta medida, que busca proteger la integridad del árbitro y la imagen del fútbol, promete ser un paso significativo hacia un juego más ordenado y respetuoso. La expectativa es que, con su implementación, los partidos no solo ganen en fluidez, sino que también se refuerce el papel del capitán como líder dentro del campo de juego.