El arquero marplatense, además de lucirse con otra actuación sólida, recibió un homenaje especial y alcanzó un récord que lo coloca entre los grandes de la historia albiceleste.
El reconocimiento de Boca y un gesto inolvidable
Previo al partido, el Consejo de Fútbol de Boca, representado por Marcelo Delgado y Raúl Cascini, entregó a Martínez una obra de arte titulada *“Las manos iluminadas”*, un trofeo dorado que representa guantes sosteniendo un balón. Este gesto fue un reconocimiento por haber sido galardonado con el Trofeo Lev Yashin como mejor arquero del mundo, premio otorgado por *France Football*.
Martínez, visiblemente emocionado, expresó: *“Es un orgullo recibir este reconocimiento en un estadio tan emblemático. Pero mi enfoque siempre está en mantener el arco en cero, más allá de los títulos”*.
Un récord compartido con una leyenda
Con el encuentro frente a Perú, Martínez alcanzó los 49 partidos con la Selección Argentina, igualando la marca de Roberto «Pato» Abbondanzieri, uno de los ídolos históricos de Boca. Este logro lo posiciona como el tercer arquero con más presencias en la historia de la Albiceleste, solo detrás de Sergio Romero (96) y Ubaldo Fillol (58).
En su paso por la selección, el Dibu ha cosechado títulos que ya lo consagran como una figura icónica: la Copa del Mundo en Qatar 2022, dos Copas América (2021 y 2024) y la Finalissima contra Italia en 2023.
El show del Dibu: conexión con la hinchada
El arquero no solo brilló bajo los tres palos, sino que también conquistó a los hinchas con su habitual carisma. Durante el calentamiento previo al partido, Martínez realizó su característico «baile del penal», aquel movimiento que inmortalizó en la final del Mundial ante Francia. El gesto fue ovacionado por una Bombonera repleta, que lo acompañó con cánticos y aplausos.
Además, el número 23, grabado en la parte posterior de su cabeza como homenaje a su dorsal, fue otra muestra del vínculo especial que tiene con los hinchas y su compromiso con la camiseta albiceleste.
Un arquero que no se conforma
Pese a los logros y el reconocimiento, el Dibu dejó en claro que su ambición sigue intacta: *“Estar tercero en esta lista no me da ganas de relajarme. Quiero seguir mejorando y da gusto jugar acá”*.
Con su combinación de talento, liderazgo y personalidad, Emiliano Martínez continúa escribiendo páginas doradas en la historia de la Selección Argentina, consolidándose no solo como un ícono del presente, sino como un referente para las generaciones futuras.
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